Todos los materiales de construcción poseen diversas propiedades frente a ciertas solicitaciones del medio, que originan comportamientos no deseados para el edificio, y eventualmente sus ocupantes.
Estos comportamientos, en el caso de la madera, propios del material, pueden disminuirse o aun eliminarse mediante tecnologías de transformación, pero que son inherentes a su constitución como material.
INTEMPERIE – EL UV, VIENTO Y LLUVIA
La intemperie afecta con crueldad a prácticamente todos los materiales de construcción. Algunos soportan mejor el paso de los años y otros acusan el impacto, que en ocasiones termina con su desaparición. Si dejamos de lado la biodegradación (que no requiere necesariamente de la intemperie), la madera sale bastante airosa de este desafío.
Todas las especies de madera están compuestas por dos elementos.
La celulosa es la materia principal de composición de la madera
La lignina es la sustancia que confiere cohesión a las fibras de celulosa.
El problema básico de la madera a la intemperie es el efecto del ultravioleta de la luz solar que ataca la lignina, produciendo ese característico color gris de todas las especies de maderas al exterior.
En el caso de maderas blandas, los efectos del medio, agua y viento, pueden generar cierta erosión superficial en las fibras más blanda correspondiente al crecimiento en las temporadas cálidas (primavera, verano). Imagen de la izquierda.
Es posible solucionar estos comportamientos mediante el empleo de sustancias de protección.
Dice el diccionario a cerca de proteger.
Proteger: Resguardar a una persona, animal o cosa de un perjuicio o peligro, poniéndole algo encima, rodeándole.
PRODUCTOS DE PROTECCIÓN DE LA MADERA:
Ambos tipos de productos protegen la madera de los efectos nocivos del UV solar generando una suerte de barrera al paso de los mismos. Se comportan como filtros solares.
En ambos casos a mayor pigmentación mayor índice de protección.
Si bien ambos productos son aptos como elementos de protección, en el caso de las lacas y barnices, (formadores de película) el mantenimiento exige mayor trabajo.
Dado que la protección solar se genera mediante la película que forma el producto y que actúa como filtro solar, para realizar un correcto mantenimiento en necesario lijar las superficies y en aquellos sitios en donde, por su exposición, se encuentran más deteriorados se debe retirar toda la película por rasqueado para volverla a aplicar.
En el caso de los lasures, la protección solar se genera por pigmentación de las superficies expuestas al sol sin crear película, de esta forma el mantenimiento solo requiere de una limpieza para eliminar el polvo para luego volver a aplicar el producto.
Ambos productos son producidos en terminaciones brillantes y satinadas y con base al solvente o acuosas.
Independientemente del grado de protección de cada alternativa, la elección de las diferentes terminaciones y colores de pigmentación la elección en muchos casos tiene que ver con decisiones estéticas y de embellecimiento.
Protección contra el UV Solar + embellecimiento
LAS PINTURAS
Las pinturas forman la otra gran familia de productos que protegen a la madera de la acción de los agentes medioambientales.
A diferencia de los anteriores productos que forman una barrera que actúa como filtro solar, en el caso de las pinturas esta barrera es total. De esta forma es la pintura la que queda expuesta y la que debe soportar la agresión de UV solar.
Su duración a la intemperie dependerá del tipo de pintura.
Muchas veces, cuando de madera y pinturas se trata, surgen dos posturas. Están quienes afirman que el material debe ser empleado y expuesto con sus naturales propiedades expresivas, es decir, si se usa madera se debe ver madera. Para estos casos la opción más lógica son los barnices, lacas y mejor aún los lasures ya que los mismos permiten seguir apreciando el veteado, nudos y texturas naturales de la madera.
Hay quienes afirman que el empleo de pinturas no resta autenticidad al material ya que, a pesar que no es posible apreciar el material con su textura natural, se sigue leyendo madera en las terminaciones a pesar de esta capa de revestimiento. La madera pintada sigue siendo madera.
Lo cierto que ambas alternativas son eficientes y en el caso de las pinturas ofrecen una excelente protección de la madera frente a los agentes climáticos y en particular del UV solar, su principal enemigo.